¿En qué medida se relaciona mi trabajo con la idea de comunicación en evolución? Bueno, la comunicación por naturaleza siempre está en evolución, lo más fascinante de la cadena emisor-mensaje-receptor, es que lo que se dice no es igual a lo que suena y no es igual a lo que se oye. Es el tema de la interpretación y la traducción. Nadie lee el mismo libro, nadie ve la misma película… porque la percepción es tan creativa como la emisión, y la memoria también. A mí lo que más me atrae de la comunicación es la mis-comunicación, los errores de comunicación, la entropía de la comunicación, aquello que se pierde inexorablemente en el mismo acto de hablar y de escuchar, de escribir y de leer, de presentar y de percibir. Y otro asunto que me fascina son los códigos de comunicación, los "sobreentendidos", el "equipaje cultural", los "fantasmas semióticos", y en fin, todo aquello que hace que un breve movimiento de cabeza signifique cosas completamente distintas en Japón, Turquía o España; diferentes para un adolescente que para un cuarentón; diferentes para un universitario, un intelectual, un contable o una monja.
Dora García